La revista Panorama da AQÜICULTURA apareció en 1989, en formato de boletín, inicialmente impreso en dos hojas. El enfoque inicial fue ofrecer apoyo a un sector que se estaba estructurando a fines de la década de 1980, cuando la piscicultura tenía sus ojos puestos en el pacú, el curimbatá, las clarias y el bagre americano. La tilapia, sorprendentemente, era vista como un pequeño pez lleno de espinas, una plaga que abarrotaba cualquier lugar en el que entrara.
En sus inicios, Panorama da AQÜICULTURA se distribuía de forma gratuita, llevado por correo a productores, académicos y cualquier otra persona que mostrara interés en la acuicultura, una actividad poco conocida hasta entonces. Y para que todo esto sucediera, contamos con la asociación y publicidad de empresas que, ya en esa época, producían y vendían importantes insumos, entre ellos alevines y postlarvas de camarón (el vannamei todavía era un ilustre desconocido). Y así construimos un vehículo de comunicación del sector, y a través de él democratizamos la información técnica hasta entonces restringida al ámbito académico. Vivíamos un momento en el que la acuicultura buscaba formas de organizarse, creando asociaciones y promoviendo simposios y congresos que necesitaban ser publicitados para que pudieran atraer al mayor número posible de personas interesadas en debatir el rumbo de la actividad.
A lo largo de los años, hemos tenido el placer y el privilegio de seguir y compartir todo el desarrollo del sector y sus grandes transformaciones, como la aparición del primer alimento acuícola, hecho especialmente para alimentar camarones; obtención de la primera tilapia reversa sexualmente; el uso de las primeras jaulas; el surgimiento de la industria de transformación; la aparición de cepas mejoradas genéticamente; la ocupación de las aguas de la Unión por la acuicultura; los marcos jurídicos; los primeros brotes de enfermedades que impactaron tanto en la piscicultura como en la camaronicultura; las primeras vacunas y tantos otros momentos que marcan la historia reciente de la acuicultura en nuestro país. Y es muy bueno estar seguro de que, en muchos de estos momentos, la revista Panorama da AQÜICULTURA ha intentado anticiparse a las transformaciones, tratándolas en profundidad para ofrecer siempre información de calidad y, sobre todo, ideas para la reflexión.
Ahora, 36 años después, aquí estamos poniendo en tus manos la edición número 200. Como todas las anteriores, también es el resultado de un esfuerzo colectivo, por lo que agradezco, en primer lugar, a todos los miembros de nuestra redacción su dedicación y amor en la forma en que llevan a cabo el trabajo. En la persona de mi querido amigo Fernando Kubitza, también socio de las serenatas, quiero agradecer a nuestros grandes colaboradores por haber aportado su conocimiento que, estoy seguro, tiene un impacto muy positivo en el día a día de quienes se dedican a la acuicultura, ya sea en el campo o en las universidades. Y no podemos dejar de expresar nuestro más sincero agradecimiento a las empresas colaboradoras patrocinadoras, sin las cuales sería imposible compartir información e ideas de la forma en que lo hemos estado haciendo durante casi cuatro décadas.
Celebrar es importante porque nos da la dimensión de cuánto terreno se ha recorrido, recordándonos los dolores y las delicias de cosechar los frutos de una hermosa obra. La edición 200 es tuya. ¡Buena lectura para todos!