Los precios del camarón en granja están cayendo en todos los países productores del mundo. A finales de junio, el tamaño de referencia 60 (alrededor de 17g) mostró los siguientes precios: US$ 3,84 en Vietnam, US$ 2,88 en India, US$ 3,62 en Indonesia y US$ 2,20 en Ecuador. Esto es de los precios más bajos que la industria ha visto en la historia (sin contar la inflación). ¿Qué pasa?

Los precios son generalmente una función de la demanda frente a la oferta, así que revisemos la demanda de los mercados más grandes. El mercado estadounidense se recuperó después del bloqueo de COVID para importar 900.000 toneladas en 2021. Esto se redujo a 800.000 toneladas en 2022 y se pronostica que terminará 2023 en 650.000 toneladas. Las causas fundamentales son la inflación, los problemas de la cadena de suministro que aumentan los precios minoristas, y las incertidumbres económicas mundiales que comenzaron a activarse en el segundo trimestre de 2022.

El camarón es un producto altamente elástico al precio, lo que significa que cuando los precios aumentan, el consumo disminuye. La UE-27 más el Reino Unido se enfrentan a desafíos similares que afectan al sector de servicios de alimentos, así como al comercio minorista y, por lo tanto, el camarón tigre negro también se ve afectado. China mostró un pronóstico positivo ante la noticia de la reapertura con enormes importaciones de camarón en el cuarto trimestre de 2022, terminando el año con más de 900.000 toneladas. Sin embargo, este repunte no ocurrió y el consumo de camarón ahora está estancado. Informes no verificados estiman que China tiene 6 meses de inventario y casi 50.000 toneladas de camarones congelados en busca de instalaciones de almacenamiento en cámaras frigoríficas. La población china puede ser rica en efectivo después del confinamiento, pero no están gastando debido a la falta de confianza en el futuro de la economía. Esto promueve el ahorro y envía a la economía a una espiral descendente adicional. Además, el desempleo entre los jóvenes de 16 a 25 años es del 20%, un máximo histórico.

En términos de oferta, la industria reportó una producción global de 5,5 millones de toneladas en 2022, liderada por Ecuador, que pronostica otro máximo de producción, cerca de 1,5 millones de toneladas en 2023. Los precios bajos en granja no es nada nuevo en Ecuador. En septiembre de 2020, el precio para el tamaño 60/kg cayó a US$ 2,70 y los exportadores reaccionaron reposicionando las exportaciones para centrarse en los Estados Unidos, la UE y China. Sin embargo, esta vez es diferente, ya que el costo de producción ha aumentado impulsado por los altos costos de alimentación y energía que contribuyen a márgenes negativos para los agricultores. Willem van der Pijl de Shrimp Insights informó que las exportaciones de junio de 2023 de Indonesia han caído un 19% interanual. Indonesia es más vulnerable, ya que exporta casi el 80% de su camarón a un mercado, es decir, los Estados Unidos, y esto destacó como el principal desafío en la reciente Conferencia de Acuicultura del Camarón organizada por Petambak Muda Indonesia (PMI).

Rabobank ya había pronosticado en su informe de proteína animal que 2023 vería inflación, recesión y vientos en contra. Sin embargo, la situación es más grave para la industria camaronera que lo previsto. La intención de este editorial no es dramatizar la «fatalidad y la tristeza», sino garantizar que la industria acepte la realidad y supere la negación y la ira y se mueva rápidamente hacia la aceptación. En resumen, «Impulsar los motores para desafiarse entre sí y superar el volumen de producción de 1 millón de toneladas en cada país no es el camino a seguir». La pregunta que a menudo se hace es ¿Quién va a comprar todo este camarón?

En el camino a seguir, lo primero que hay que recordar es que estamos todos juntos en esto, no obstante, si somos Ecuador, India, Vietnam o Indonesia. La industria necesita poner el marketing por delante de la producción mediante la creación e incremento de la demanda. Ahora que los precios son bajos, debería ser más fácil de hacer, y los proveedores deberían subirse a esta ola. Este será el punto principal del diálogo de la industria con la generación más joven de productores en TARS 2023 Shrimp Aquaculture – Regeneration. Kontali también estará en TARS para discutir los mercados nacionales y regionales. Aunque el sueño es tener un marketing genérico global, seguirá siendo un sueño imposible. Sin embargo, la comercialización genérica por país es alcanzable. Las asociaciones nacionales pueden basarse en la calidad, la sostenibilidad y la marca para la exportación mientras desarrollan un mercado local. Aquí hay una oportunidad para la autorregulación y la eliminación de las manzanas podridas. ¿Pueden ayudar los gobiernos? Un sí rotundo en la promoción de la calidad, la transparencia y la trazabilidad con el país de origen. Lo que los gobiernos no deberían hacer es restringir las importaciones a través de barreras arancelarias y la implementación de políticas de empobrecer al vecino que beneficien a un país al perjudicar a sus vecinos y socios comerciales.

Con cada crisis, viene una oportunidad. Winston Churchill dijo una vez: «Nunca dejes que una buena crisis se desperdicie». La industria camaronera no debe desperdiciar esta crisis.

Editorial de la revista Aqua Culture Asia Pacific. Julio/agosto de 2023.